Más que un método adivinatorio, el Tarot es una herramienta poderosa para el auto conocimiento.
A través de sus arquetipos nos revela una conexión con nuestros sentimientos más profundos.
A lo largo del tiempo, se le ha dado una connotación negativa, basada en la ignorancia, haciéndolo ver como algo demoníaco o maligno; cuando en realidad, al igual que en cualquier otro ámbito, lo que puede darle ese toque negativo, es la intención que hay detrás de aquel que lo interpreta o lo juzga.
Los símbolos de sus arcanos están conformados de una riqueza maravillosa que nos habla de la vida del ser humano en todas sus manifestaciones, tanto interna como externamente. Es un recorrido por cada una de las etapas de la vida y sus diversos ciclos.
Grandes psicoanalistas tales como Carl Jung y Sigmund Freud, realizaron estudios extremadamente interesantes que vinculan el significado de la simbología de las cartas con el inconsciente del ser humano, convirtiéndolas en una valiosa herramienta para el psicoanálisis.
Aunque muchos estudiosos del Tarot lo ven meramente como una herramienta de análisis, para mi hay una conexión más profunda… la conexión de la intuición y la energía entre el lector y el consultante. La conexión con el Poder Creador; la Divinidad y la sabiduría del corazón que unidas, pueden percibir y sentir a niveles inimaginables.
Creo con firmeza, que todos tenemos la capacidad de desarrollar nuestra intuición y nuestra percepción, pero no muchos lo practicamos, ya que nos bloqueamos desde el momento que decidimos no creer en ello.
En mi experiencia, lo que marca realmente la diferencia en una lectura es la seriedad y el compromiso del consultor hacia su trabajo, es el reconocer el impacto y la influencia enorme que nuestras palabras pueden tener en cada persona que se atiende. Es el mantener un alto sentido de la ética y recordar que cada uno de los consultantes van más allá de ser un modo de ingreso, son parte esencial en nuestro crecimiento y evolución; siendo también nuestros maestros y mensajeros, ya que podemos conocer y entender el mundo a través de sus formas de vida y sus historias.
Por varios años he impartido el seminario “Los Códigos Sagrados del Tarot” y entre los diversos temas que tratamos, se encuentra la codificación de cada una de las cartas a través de su simbología y la conexión que resuena con cada uno de mis estudiantes. Los códigos, se convierten así, en un lenguaje de comunicación que, de acuerdo al acomodo de las cartas durante la lectura, crean lo que pudiera llamarse una “ecuación matemática”, en la que podemos encontrar un mensaje que está ligado al inconsciente del consultante, ayudándolo a descubrir cosas extremadamente interesantes.
En lo personal, creo que los mensajes de sus arcanos pueden dar la pauta para que el consultante, inicie el cuestionamiento que lo lleve a encontrar el sendero a el interior de su ser.
Frecuentemente deseamos encontrar soluciones externas o creer que aquel a quien consultamos nos traerá el cambio que deseamos como por arte de magia, sin saber, que depende única y exclusivamente de nosotros mismos, el usar nuestro libre albedrío para decidir o definir el tipo de vida que deseamos vivir o la forma en la que reaccionamos ante los acontecimientos. Estamos buscando solucionar algo interno con algo externo, y eso jamás podrá ser. Para que exista el cambio, debemos de empezar por auto observarnos y darnos cuenta a lo que le estamos dando vida en nuestra mente y en nuestro corazón. Es importante tomar conciencia y hacer los cambios necesarios para que exista una congruencia en lo que pensamos, sentimos, decimos y hacemos, y una vez que todo esto esté en positivo, entonces podemos empezar a cambiar el rumbo de nuestra vida.
Vivimos con una programación de paradigmas limitantes que nos impiden vivir plenamente. Nos aferramos a creencias viejas y obsoletas que se convierten en cadenas asfixiantes que nos mantienen en el estancamiento, únicamente por que es más fácil vivir en la inconsciencia, ya que nos enseñaron a aceptar todo lo que nos decían sin cuestionar, y así, vamos avanzando por la vida como borreguitos creyendo un sin fin de barbaridades, en lugar de cuestionar, de investigar, de aprender, ya que es más fácil ver una telenovela en la televisión que leer un libro o porque toma menos esfuerzo conformarnos a vivir insatisfechos o infelices que salir de la zona de confort y dar los pasos al cambio.
Con frecuencia nos aferramos a sentimientos destructivos, como el resentimiento, la tristeza, el odio, el rencor, sin saber que nos estamos envenenando a nosotros mismos al vivir aferrados a ellos o al estar estancados en el pasado. Nos sentimos que no somos merecedores de una vida plena o que nunca vamos a poder felices, y llegamos con toda esta carga, deseando que el Consultor nos resuelva una situación que va más allá de una sesión de cartas.
Efectivamente, los mensajes pueden ser una guía maravillosa, pero el único que tiene la capacidad de hacer los cambios es uno mismo.
Los arcanos del tarot no te van a resolver un conflicto, más sí te pueden guiar y dar una visión profunda del porqué estás viviendo en él, ofreciéndonos un panorama más amplio desde una perspectiva en la cual tal vez jamás hubiésemos visto, ya que cuando estamos sumidos en la desesperación, el sufrimiento o el negativismo, no podemos ver la luz al final del túnel. Y es justo la labor del lector, el recordarle al consultante que nosotros somos esa luz que estamos buscando y que depende de nosotros mismos el permitir que brille o permanezca opaca. Vivimos buscando que ocurran milagros en nuestra vida, sin darnos cuenta que nosotros somos el verdadero milagro y que lo único que necesitamos es empezar a honrarnos y vernos como tal.
Con casi 30 años de experiencia como lectora, he sido testigo de la transformación de miles de personas que, a través de los mensajes de los arcanos, han encontrado el sendero que los lleva al interior de su ser, para observar la vida que han estado creando y los cambios que pueden lograr al dejar a un lado el victimismo y retomar su poder interno y la responsabilidad total de su vida. Antes de iniciar cada sesión le recuerdo al consultante que la lectura, es únicamente una guía, pero que es el único que tiene el timón de su barco y que solamente él puede decidir hacia qué rumbo desea dirigirlo.
-Señora Cristal
Porque tú mereces una vida feliz!
PRÓXIMO TALLER:
Marzo 11, 12, 18 y 19 de 2017 – Seminario los Códigos Sagrados del Tarot